El doliente de Puebla. Hace muchos años en uno de los caminos que llevaba a una de las minas de Puebla, los
mineros que salían de su turno casi a media noche, comenzaron a escuchar los llantos de un niño, los hombres que eran cientos, comenzaron a buscar aquel niño, pero por más que buscaron no pudieron encontrarlo, así que después de unas horas decidieron marcharse. Después de ese día todos comenzaron a temer al pasar por ese lugar, incluso decidieron llevar un sacerdote, y con la ayuda del pueblo comenzaron a buscar durante el día y al final encontraron un muñeco lleno de agujas enterradas. El padre se acercó y comenzó a rezar, al hacerlo gruñidos comenzaron a salir del muñeco, pero el padre no se detuvo hasta que termino de rezar, después de eso decidieron enterrar al muñeco. Después de unos días todo el pueblos se entero que un hombre el cual había estado enfermo por muchos días sin saber porque, se había curado repentinamente.