Cuenta la leyenda de las comadres que hace muchísimo tiempo en la ciudad de
Guanajuato existían dos amigas que eran muy intimas, se querían mucho la una a la otra y compartían su trabajo, el cual era subir al cerro a recoger plantas que luego vendían en el mercado, siempre se quedaban sobre el cerro hablando de cosas mundanas, hasta que un día comenzaron a hablar de amor, en medio de las historias ambas cayeron en la cuenta de que las dos estaban enamoradas del mismo hombre, esto provoco una gran pelea que paso de una simple discusión a los golpes, por esto fueron maldecidas y se transformaron automáticamente en piedra, aun hoy se las puede ver sobre el cerro que lleva su nombre, el cerro comadres, paradas una junto a la otra pero mirando a lados opuestos, pero teniendo que soportarse por siempre unidas.